Nuestra Historia

Rev. Dr. Abelardo Berrios Rivera
1916-1991
El Rvdo. Abelardo Berrios fue el octavo hijo de una familia de nueve. Sus padres fueron: Serafín Berrios y María Dolores Rivera. Nació el 16 de agosto de 1916 en el barrio Tejas de Humacao, Puerto Rico. Desde muy niño se vislumbró en él cualidades muy especiales, era un joven bien educado con muchas aspiraciones. En el año 1939, el evangelio llegó al barrio de Tejas de Humacao, los vecinos del barrio acudían a escuchar los mensajes y entre ellos también asistía el joven Abelardo. En el año 1940, entregó su vida a Jesucristo. A raíz de su conversión, las cualidades especiales en el joven Abelardo se fueron desarrollando con mayor rapidez.
Se unió a su pastor, el Rvdo. Onofre de León, para ayunar y orar con vehemencia delante del Señor. Su desarrollo cristiano se debió a su amor por la lectura de la Biblia y largos periodos de oración y ayuno. Por recomendación del Superintendente de la Iglesia de Dios Pentecostal, Inc., el hermano Abelardo Berrios Rivera fue al Instituto Bíblico Mizpa, donde se graduó con honores y más tarde llegó ser maestro de dicha institución. Después de graduarse, fue llamado a ser el pastor asistente de la Iglesia del “Coquí” en Salinas, Puerto Rico. Posteriormente es llamado a ocupar el pastoreo de la Iglesia de Dios Pentecostal del barrio Tejas de Humacao. Estando allí, hizo un solemne compromiso con Dios: “No casarse hasta escalar el completo ministerio.”
En el año 1947, ya habiendo sido ordenado al completo ministerio, conoció a la hermana Carmen Camacho y tres años después se unieron en matrimonio. Su boda se efectuó en la Iglesia de Dios Pentecostal “La Sinagoga” en la ciudad de Nueva York, de dicha unión nacieron cinco hijos: Abelardo Jr., Judith, Ruth, Bernice y Raquel.
Al estar pastoreando en Puerto Rico, los pastores Berrios recibieron una solicitud de la Iglesia de Dios Pentecostal “La Sinagoga,” les pedían que pastorearan la iglesia en Nueva York. El Rvdo. Berrios presentó este asunto al Señor en oración, quien le respondió: “Yo Soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob. Ve a Nueva York, yo estaré contigo y te daré sabiduría.” Después de dejar todo en orden, en el 1951, partió hacia Nueva York a pastorear la Iglesia de Dios Pentecostal “La Sinagoga.”
Observando el Rvdo. Abelardo Berrios la responsabilidad por los cargos que ocupaba, se matriculó en la Universidad de Long Island donde en 1973 recibe su bachillerato en Ciencias de la Educación. Más tarde en el Colegio Hunter de Nueva York, recibe su Maestría en el año 1982 y posteriormente su Doctorado en Divinidades.
El 24 de diciembre de 1991, en una forma sencilla, Dios llamó al Rvdo. Abelardo Berrios Rivera a su bien merecido descanso. Había pastoreado por 40 años la Iglesia de Dios Pentecostal “La Sinagoga” y por 37 años consecutivos fue el Obispo y presidente del Concilio Latinoamericano de la Iglesia de Dios Pentecostal, Inc., que comenzó desde cero y terminó dejando más de 500 iglesias y cerca de 900 ministros. El Rvdo. Berrios fue también el fundador, director y maestro por más de tres décadas del Instituto Bíblico Latinoamericano.
El Rvdo. Berrios fue un hombre muy querido y admirado por todos los que le conocieron; hombre conservador y reservado. Fue pastor, predicador de muchos recursos, excelente maestro, consejero y líder indiscutible.
LAS MISIONES EN COLOMBIA
Los misiones del Concilio Latinoamericano en Colombia nacieron de manos del pastor Rev. Emilio Zayas quien por la década de los 1950 vino como misionero de la Misión Bautista, y desarrolló gran parte de su trabajo a orillas del río Magdalena, región donde la predicación del Evangelio, en ese momento era muy difícil.
En se tiempo el Rev. Zayas estuvo pastoreando en Barranquilla, luego en Palmira, después en Bogotá. En Barranquilla abrieron una Misión en el barrio “La Union” dónde se fundó posteriormente la “Iglesia Cristiana Salem” con el apoyo de las familias Salcedo, Rodríguez, Castro, Reales y varias otras que allí recibieron la promesa del Espíritu de hablar en otras lenguas, y de tener dones sobrenaturales que Dios le dio.
Al desmembrarse de la misión bautista, la iglesia Salem continuó adelante bajo la dirección del pastor Rev. Emilio Zayas, y con un esforzado trabajo de evangelismo, fundaron varias iglesias, entre ellas, la “Iglesia Cristiana Primitiva”, la “Iglesia Misionera”, la “Iglesia de Cristo” y varias obras más.
Con el paso del tiempo llegaron misioneros de la República Dominicana, se hicieron más campañas de evangelismo y se fundó la iglesia “El Tabernáculo” donde se instaló como pastor al Rev. Rafael Arias Padilla, también de República Dominicana. Las Iglesias tuvieron conversaciones con el Rev. David Williams de las Asambleas de Dios, y con el Rev. Abelardo Berríos del Concilio Latinoamericano. Bajo la guianza del Espíritu Santo, y luego de celebrar un referéndum en Barranquilla por ser donde se originó la labor misionera, se acordó quedar anexados al Concilio Latinoamericano de Nueva York, y se formó una directiva conformada por: Rev. Emilio Zayas, Presidente; Rev. Rufino Monterrosa, Vicepresidente; pastor Miguel Zapata, Secretario; pastor Dagoberto Reales, Tesorero.
Acontecimientos más o acontecimientos menos, en aquella década de los ’50, fueron unas seis o siete iglesias las anexadas, quedando como madre la “Iglesia Cristiana Salem” y las iglesias: “El Tabernáculo”, “Primitiva”, y la iglesia de Cristo hoy llamada “Sinaí” en ese momento pastoreada el Rev. Alfredo Castro.
Todos los pastores trabajaban en empresas privadas o en instituciones seculares reconocidas, antes de dedicarse a tiempo completo al pastorado. Otra iglesia se abrió en ese tiempo: “El Jordán” ubicada en la casa 22, calle 45 b, con el pastor Jaime García. Nacieron nuevas iglesias. El pastor Alfredo Castro en su casa puso banquetas y allí, con el trabajo dinámico de su esposa y de su hermana hicieron un semillero de niños. La gracia de Dios siempre fue con ellos hasta que posteriormente, con donaciones, y con el aporte del Concilio desde Nueva York, se pudo comprar esa casa y allí, entonces, en se fundó la iglesia en su propia casa que es el mismo lugar en el cual funciona hasta hoy.
Labor ponderada en este tiempo maravilloso de crecimiento fue la que hicieron los pastores Otoniel Salcedo, Dagoberto Reales, Rafael Arias Padilla, Miguel Zapata. Alfredo Castro, Jaime García. Se fundaron las iglesias: “Primitiva” “El tabernáculo”; “Iglesia de Cristo” “Sinaí”, “El Jordán”.
El pastor Emilio Zayas además de misionero era el Presidente de la Asamblea, hasta cuando desde New York enviaron un Representante Legal. Se celebraban las convenciones cada año, pero en la misma forma, como hoy y cada 2 años se cambiaba la Presidencia que alternadamente fue ejercida por los pastores: Emilio Zayas, Dagoberto Reales y Otoniel Salcedo, hasta que llegó el pastor Alberto Molina desde los Estados Unidos, nombrado como misionero para Colombia. En ese momento, el pastor Dagoberto Reales era el Presidente. Le siguió en la presidencia el pastor Alberto Molina hasta cuando fue llamado por el Señor. Entonces asumió la Presidencia el Vicepresidente, Jairo Osorio, quién hasta el momento está presidiendo el Concilio Latinoamericano en Colombia.
El puertorriqueño Rev. Juan Tolentino durante ese periodo estuvo más bien dedicado al Instituto Bíblico. El Rev. Abelardo Berríos dio la autorización para que funcionara el Instituto Bíblico en Colombia. Lo iniciaron en la “Iglesia Cristiana Salem”. De todas las demás iglesias llegaban para recibir las enseñanzas teológicas. Pasado algún tiempo, con la ayuda y el apoyo de la hermana Marta Inés Monterrosa se logró que la Secretaría de Educación del Gobierno de Colombia apruebe la documentación necesaria, y conceda la licencia de funcionamiento del Instituto bíblico Latinoamericano en Colombia… ¡Y seguimos adelante, con el poder del Espíritu Santo!
Nuestra Misión
C.I.L.A. es una organizacion de caracter religioso que mediante las iglesias asociadas levanta, capacita, fortalece y envia sus miembros, para satisfacer necesidades identificadas en nuestro pais, comprometidos con la extensión del reino de Dios, hacer discípulos y establecer nuevas congregaciones, mediante la evangelización, intercesión, enseñanzas de la palabra, administrando bajo la direccion del espiritu santo los recursos que Dios nos ha provisto.
Nuestra Visión
Al terminar el 2025 seremos un concilio misionero y restaurador, con presencia en Colombia atravez de 75 iglesias (3 iglesias por año), en las cuales se integran los 5 ministerios dado por la palabra, cumpliendo al nivel local, municipal, nacional con la gran comision. De llevar el evangelio del reino de Dios y preparar a los creyentes para el arrebatamiento.
